miércoles, 28 de diciembre de 2011

La calma
no ayuda.
Sí,
tengo prisa.
Los
días
son
largos
pero
la vida no.

martes, 27 de diciembre de 2011

Pregunto
cuando la respuesta es obvia
pensando que al materializar las ondas
se hará más fuerte o se desvanecerá del todo
la verdad.

Jamás ha ocurrido ninguna de las dos,
solo un silencio afilado
y mucha vida por delante.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

hojas en blanco que indican
caminos a un adjetivo
lejano. Cartas
enviadas para no sentir;
letras escritas en el agua de un río a la deriva.

Somos, seremos, sabemos, leemos,
cogemos el ritmo de nuestros aplausos.
Subimos, pensamos, iremos, sabremos
el suelo, los cielos, el tiempo,




la calma

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Los
recuerdos son
regalos con el tictac
continuo de un paquete bomba,
sobres llenos de antrax,
llamadas muy
perdidas.

viernes, 2 de diciembre de 2011

No es tu nombre lo que busco,
es tu mirada.

No es tu sueldo lo importante,
es tu palabra.

Tus libros en la ventana me enternecen,
no ese coche
que se escapa calle abajo
mientras llueve y espero
que escampen las pisadas.
Como la tarde fría empaña la ventana
veré perderse en la noche tu mirada hoy.

quizás mañana.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Llegué por el dolor a la alegría.
Supe por el dolor que el alma existe.
Pepe Hierro

Llegar
no es el camino.

Saber
no es la repuesta.

Es carrera perdida
existir.

Y lamento 
la cordura.

Mover no todo el mundo puede
su vida al ritmo necesario
para llegar temprano a su destino,
no tarde, no frío
no andando.

lunes, 28 de noviembre de 2011

Ser
-como el folleto que se encuentra en la mochila
meses después de aquel viaje a aquel lugar,
durante aquella vida-
un recuerdo de uno mismo, atrapado en otro tiempo,
otro lugar, traslocado

y, sin embargo,
tú.

martes, 15 de noviembre de 2011

Escribo ahora con la desesperación del suicida, [...]
Los errores cometidos [...] parte inevitable de una realidad vital [...] ahora, al abrigo de la soledad, [...] son metralletas constantes contra el muro del sueño,
ensordecedor estruendo.
Mi yo futuro [...] se está yendo [...]. No puedo atraparme con mis propias manos [...] manchadas con los errores que intento ocultar.

(Fragmentos de Una península aislada de Guillam Ben Horan)

domingo, 6 de noviembre de 2011

La lluvia... y antes de poder acabar
tan siquiera la frase
calló como una losa silenciosa,
cayó como una boca al suelo de la lona
y dejó flotando como una pluma
la posibilidad de conocer
más significados de la palabra lluvia.

martes, 1 de noviembre de 2011

El norte. Por fín
sé dónde está el norte.

No es frío como el viento,
ni es nieve como en el sur
de la región. Es cálido
como un latido abrazado a un sofá,
sonriente como un vaso
cercano al beber, ansiado ahora que tengo ojos.

La estrella polar está al norte.
Sé, por fín hacia dónde ir. Lejos.
Pasado. Ruidoso, doloroso.
Tarde.

Pero constante y seguro. Sé, dónde buscar
la brújula de mis días.
Era una mancha en el hojal de la camisa,
un dedal sin huecos finos,
un hilo perdido, una aguja clavada en el alfiletero,
un cajón de sastre ejemplificante.

Arreglando el saliente de la cabeza.
Pidiendo aire sin voz.

Mirando, como solo miran los que saben lo que ocurre,
la pared que oculta nuestra habitación.

Cosiendo el tiempo.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Cuando los silencios me salen por la culata
y descubro que un error conlleva,
para siempre,
el olvido de una posibilidad,
el desvanecimiento de un sueño común,
el golpeo incesante contra un precioso muro,
aprendo que no siempre se aprende a tiempo,
que no siempre una sonrisa encuentra otra,
que buscar no es sinónimo de encontrar,
e insisto en que no pienso parar
hasta que las fotos me revelen un diálogo de silencios, un conjunto armonioso.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Se acaba la estimable colaboración
como se enturbia el agua tras la riada
y las horas parecen no tener final
en este invierno estival
que asola cada minuto de nuestras playas.

Empieza tras el grito, el año perturbado
por las caminatas y el ajetreo de los párpados.

Dormidos estaremos cuando queramos despertar.
despiertos al amanecer de una madrugada inerte.

Se acaba la inestimable colaboración.

martes, 12 de julio de 2011

La mayor forma de melancolía
es pasarse una tarde
-repiqueteo de lluvia tras los cristales-
hojeando tus libros
a la búsqueda de marcas de lápiz que indiquen
qué te gustó antaño, qué letras provocaron
un sentimiento en tí.

Es, esto, volver y revolver a otras tardes, a otros tiempos, a otras melancolías.
Palimpsesto de tí.

jueves, 17 de febrero de 2011

Aún recuerdo-como si hubiese existido-
esos días en que amaba las librerías
y salía cargado de palabras.

Recuerdo aún comprar un libro
y devorar sus versos, palpar sus tapas,
besar el lomo, oler sus hojas.

Aún lo recuerdo mientras olvido
el inmenso placer que resultaba
entender
lo que otros entendieron antes.

Ahora intento olvidarme a mi mismo
para así poder
aprender a ser lo que nunca quise ser.

viernes, 28 de enero de 2011

Leído Público,
leyendo un libro
aparentemente subversivo
en las escuelas danesas,
viendo sin sonido el Ferrer-Murray,
con una brand-new copia del Gran Lebowski bajo el brazo
y tomando mi segunda birra
de un día sin planes.

I've nothin' to prove & nothin' to lose, yo

Ahí tienes.
Tu poema, tu vida