miércoles, 23 de julio de 2008

B 20 C 08 N

Caminaba mirando las tejas que dejó el viento
junto a la carretera, intentando adivinar
su tejado.

Sólo me seguían el aire, los coches
y aquella sensación extraña de haber perdido
la capacidad para entender mi futuro sin añorar el pasado.

Al torcer la esquina adiviné que la ansiedad es la enemiga del tiempo
y a pesar de creer controlarla estúpidamente nos anima
a girar hacia buscados tormentos menos placenteros
hacía futuros que no caminan sin fin,
hacia ideales conseguidos por otros.

Al volver a aquellos lugares, me apuñalaron otros tiempos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

si aún estás a tiempo incluye este..

Julio dijo...

La vida te da sorpresas...

http://sombrasdeausencia.blogspot.com/

Anónimo dijo...

Guillermo, ¿qué te pasa corazón? Yo sé que es veranito y que en esta época hasta los poetas descansan.Sin embargo, detecto que últimamente no actualizas el blog, y me pregunto si las musas no te visitan, si la inspiración te ha abandonado o simplemente lo que pasa es que hay un exceso de macroconciertos de rock, amigotes y nenas tontas que te siguen en la esperanza de que se les pegue algo de ese ingenio que gastas. Bueno, este pequeño rapapolvos para que sigas abriéndonos tu corazón loco en versos libres.