jueves, 8 de mayo de 2008

Prebiografías

El día que en aquel curso de creación literaria le dijeron que escribiese una autobiografía en una cara se dio cuenta de que no podía hacerlo. Aún no había nacido. Todo lo que había vivido hasta ese momento, era no más que una pre-biografía, al igual que la prehistoria precede a la historia.

—¿Es importante todo lo que ya he vivido, lo que ocurre antes de la historia, antes del yo? —se preguntó—.
—Sí —se respondió a sí mismo—, tanto como lo es el fuego para una barbacoa, o la rueda para la Fórmula 1, o el sílex para la Revolución Industrial o la piedra Rosetta para los traductores.

Al llegar a casa le dijo a su mujer.
— Hoy he nacido y voy a ser escritor de autobiografías.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Todo tiene mucha coherencia, pero a la vez creo que es de una persona que no sabe que camino a de elegir.

Anónimo dijo...

Me gusta leer lo que escribes, porque de una forma un poco subliminal nos dices que camino hemos de seguir, o por lo menos aconsejas cual es el camino.

Guillermo dijo...

"Todo tiene mucha coherencia, pero a la vez creo que es de una persona que no sabe que camino a de elegir."

—A veces el traviamento, las decisiones equivocadas, resultan ser el camino correcto. O tan bueno como cualquier otro.
[André Aciman. Llámame por tu nombre. Proximamente en Alfaguara]

Anónimo dijo...

Hola, me han usurpado el nick asi que te escribo como anonima. Es original esta prebiografia, pero yo sigo apostando por Puerta o por los primeros versos que lei de ti (Cristal). Soy la otra Nuria